Blogia
De Vere y Herri Gardens

Scrotum Humanum Brookes

LONDON. Michaelmas Term lately over, and the Lord Chancellor sitting in Lincoln’s Inn Hall. Implacable November weather. As much mud in the streets as if the waters had but newly retired from the face of the earth, and it would not be wonderful to meet a Megalosaurus, forty feet long or so, waddling like an elephantine lizard up Holborn Hill. Smoke lowering down from chimney-pots, making a soft black drizzle, with flakes of soot in it as big as full-grown snow-flakes — gone into mourning, one might imagine, for the death of the sun. Dogs, undistinguishable in mire. Horses, scarcely better; splashed to their very blinkers. Foot passengers, jostling one another’s umbrellas in a general infection of ill-temper, and losing their foot-hold at street-corners, where tens of thousands of other foot passengers have been slipping and sliding since the day broke (if the day ever broke), adding new deposits to the crust upon crust of mud, sticking at those points tenaciously to the pavement, and accumulating at compound interest.

 

"Implacable tiempo de Noviembre, tanto barro en las calles que parece que las aguas se han retirado de nuevo de la faz de la tierra y que no sería extraño encontrarnos un Megalosaurus, de cuarenta pies o más, anadeando como un lagarto elefantiásico por Holborn Hill."

De Bleak House, novela de Charles Dickens

Así comienza la novela de Dickens La casa Desolada, podiamos decir que presidida por la ominosa sombra del gigantesco reptil que se proyecta sobre toda la obra contagiándola de su caracter lóbrego y sombrio.

Esta fue una de las primeras apariciones en la literatura de los dinosaurios, muy temprana, porque la obra se publicó por entregas entre 1852 y 1853, se había descrito en la literatura científica por Buckland en 1824 y el término dinosaurio no se acuñó hasta 1842 por Owen. Probablemente, su popularización tuvo que ver con la exposición en 1852 en el Crystal Palace de Londres de un modelo de Megalosaurio.

Nosotros, vamos a utilizar el terrible lagarto como nuestra peculiar SERPIENTE DE VERANO, relatando algunas de las incidencias de su paso por la literatura científica.

En 1677 aparecieron cerca de de Oxford, en Cornwell, unos fósiles en piedra caliza que enviaron a Robert Plot, profesor de química de la Universidad de Oxford y primer conservador del Ashmolean Museum, que Plot indentificó correctamente como la parte distal de un femur (la que forma parte de la articulación de la rodilla). Por su tamaño, vio que no era de ninguna especie conocida y pensó que pertenecía a un gigante. Sorprende su acierto porque, por otra parte, Plot es conocido todavía hoy por su peculiar interpretación de moldes de moluscos encontrados en la zona, así describió como "Corazones de toro" el molde interno del bivalvo Protocardia o "Hippocephaloides" o "cabeza de caballo", a otro bivalvo jurásico en su libro "Natural History of Oxfordshire".

En 1763, un erudito dieciochesco, Richard Brookes, del que no hemos encontrado otra referencia, redescribió el fósil como Scrotum Humanum, quizás perplejo por su apariencia al contemplarlo en determinada postura, penso que podía ser otra parte del supuesto gigante la moldeada en tiempos prediluviales; con lo que al ser la primera nominación poslinneana se convirtió en su nombre científico oficial. Posteriormente fue Buckland el que le dio el nombre por el que se le conoce hasta la actualidad.

Creemos que fue el primer fósil de dinosaurio al que se dio nombre.

 

Patrick W. Jackson cuenta que paleontólogos e historiadores de la ciencia como Sarjeant y Halstead llamaron la atención sobre que el epiteto Megalosaurus podía no ser válido al existir Scrotum con anterioridad. Tristemente, la Comisión Internacional para la Nomeclatura Zoológica, no lo tuvo en cuenta y Scrotum pasó a ser lo que se llama nomen dubium o fuera de uso.

 

 

Scrotum humanum

10 comentarios

Vere -

Que ya va...Esta noche música que se nos ha pasado.

anarkasis -

darle una manita y reverdear un poco este cementerio donde os habeis hechao la siesta,
Que la musa dice que está de camino, pero que llega, que se le ha roto el tacón del zapato...

Charles de Batz -

"Si no es..." quería decir al empezar la frase. La marca de la casa, la mía, ataca de nuevo ;-)

Charles de Batz -

Si es musa, por lo menos ya que es viernes que sea musica, que aunque pequeña alegra el oido con sus melodías.

Salud, amigos

Vere -

Marchando...en cuanto la musa nos visite, está hecho.

Vailima -

toc, toc, toc
Ya es hora de que os vayáis poniendo las pilas. Este jardín está muy abandonado.

Vere -

Migratoria, hay cosas que a uno le dejaron pasmado de niño como Dickens y los dinosaurios y me temo que no haya tenido remedio. Anarka, no sigas que la sola imagen de una nube de ebrias anarcaidas revoloteando por nuestro jardín nos llena de placer, por cierto, divertida la coincidencia.
Charles, que haya resultado cierta la hipótesis más aparentemente descabellada para explicar la forma de una piedras no deja de ser milagroso !lagartos gigantes¡
a quien se le ocurre: estoy leyendo ahora El Conde Belisario de Graves y sumergido de lleno en el mundo lleno de reliquias que evocas.
Que las perseidas lluevan sobre vosotros cargadas de buenos augurios.

migratoria -

Dickens siempre nos remite a nuestra lejana infancia. Curioso cómo nos enlazáis a esa serpiente de verano. Aquí siempre se aprende. ¡Buen verano!: aún queda... :-)

Cordiales saludos.

anarkasis -

hay que tener unos escrotos como los del carnosaurus para venirse a mitad de vacaciones y postear, y encima lo hacen gracioso y bonito,
¡hay dios!, estos jardines me tienen embriagada




Charles de Batz -

Curioso el "Saurio de verano" que proponéis. Para mí, hasta haberos leído, que todo esto -me refiero a lo de los dinosaurios y la literatura-, lo había empezado el crédulo de Conan Doyle que dejando de lado a sus hadas le había dado por escribir aquello de "El mundo perdido". Buena aclaración y enmiendo mi error, queridos amigos.

Tiene huevos -perdón por el juego facilón de palabras-, que el primer hallazgo oficial de un dinosaurio fuera ése, que aunque era un cacho de fémur a más de uno le pareció que la cosa era otra...

No recuerdo muy bien dónde ni a propósito de qué, pero leí en cierta ocasión que durante la época bizantina -cuando lo de las reliquias era un negocio muy próspero-, se hallaron en la actual Turquia unos restos que a falta de otras referencias, los tomaron por los del dragón que mató San Jorge, y a su culto levantaron en aquél mismo lugar un templo que desapareció más tarde.

Para mi, que de ser cierto, lo que encontraron fue algo de esto de lo que estamos hablando...

Un placer volver a saber de vosotros. Nos volvemos a leer en septiembre o por correo siempre que lo deseéis.

Un abrazo

Salud